Coffee

By Ana - julio 07, 2016


No se para vosotros, pero para mí la palabra café tiene muchas connotaciones. Una frase tan sencilla como la de "nos tomamos un café?", puede encontrarse en contextos y situaciones muy distintas.
No soy una adicta al café, lo reconozco, pero sí necesito y me gusta tomarme un café en diferentes ocasiones, ¿vosotros?



Para mí, mi café con leche de primera hora de la mañana es sagrado. Sino empiezo el día con él, lo más seguro será que mi día no empiece bien. ¿también os pasa?


También me gusta esos cafés que preparas en casa cuando estás con alguien, esos que te tomas en el sofá mientras arreglas el mundo con esa buena amiga a la que hace tiempo que no ves.


Cafés en terrazas. Ese café rápido que te tomas con esa persona que hace tiempo que no ves pero tienes que hacerle un hueco sí o si´, porque ya es demasiado tiempo.


Un café en soledad, ese que te apetece tomarte cuando te encuentras con una cafetería de esas que invitan a entrar nada más verla. ¿Sabéis de cuáles os hablo, verdad?


El café después de una analítica de sangre, ese día todo vale. Lo más seguro es que con la excusa de que te han sacado sangre, optes por acompañar al café con un croissant, ¿os suena la situación?


Cafés con premeditación, sí esos que planeas con tiempo, que te apetece tanto y que sabes que se alargará hasta tarde, ¿este es de los mejores, verdad?


Ese café bonito que te preparas en casa, te levantas un día con inspiración y te apetece montarte un desayuno de cafetería mona. A mí me suele pasar el fin de semana, siempre me entran unas ganas locas de hacer desayunos bonitos y ricos :-)))


Cafés de sobremesa, esos que sirven para alargar una comida en la que te sientes tan a gusto que te da mucha pena que se acabe :-)))
Sí el café tiene infinidad de situaciones diferentes y en todas acopla bien ¿verdad?

Un beso muy fuerte y feliz jueves :-)))
Ana

Fotos vía Pinterest









  • Compartir:

También te puede interesar

0 comentarios